SENDERISMO: PR-G 188 Sendeiro de Zobra

En el suroeste del municipio de Lalín encontramos el sendero homologado PR-G 188 Sendeiro de Zobra. Es una ruta circular de 22,76 kilómetros con tres derivaciones a mayores, una de 1 kilómetro de ida hacia unas antiguas minas de estaño, otra de 450 metros hacia un área recreativa y otra de 1,5 kilómetros a la casa grande de Chedas. La ruta puede acortarse por los eólicos en Campo Valiño, ahorrando algo más de 4 kilómetros. La señalización es buena y la dificultad es alta, se pasa por caminos con agua y rocas en algunos puntos y con fuerte pendiente. En el entorno de la ruta destacan los bosques de carballos, cerquiños, pinos y monte bajo con úces y carqueixas en las zonas de más altura. Para llegar a Zobra en donde comienza la ruta podemos salir por la PO-201 en Silleda hasta llegar a la N-534 o saliendo desde Lalín por esta misma carretera dirección Vilatuxe, una vez estemos en el cruce del restaurante O Cruce, giramos dirección O Irixo, y a los pocos metros seguiremos por la derecha dirección Outeiro/Piñoi por pistas hasta Zobra, mejor llevar mapa o gps. También podemos llegar desde O Carballiño, dirección O Irixo y a continuación A Ermida, Trabazón y Zobra, aunque se recomienda llevar el gps o un mapa.

La ruta comienza en el pueblo de Zobra. Atravesamos el pueblo, en donde hay una fuente, hacia el oeste y vamos hacia un camino ancho que puede llevar bastante agua y con bastantes piedras. Pasamos un viejo molino, el sendero sigue en descenso hasta el ponte das Tenzas, que atraviesa el río Zobra, en el kilómetro uno de la ruta. Empieza un pequeño sendero en ascensión que nos servirá de calentamiento para el resto de la ruta, a lo lejos en la otra ladera de la montaña veremos colmenas de abejas. En esta zona la apicultura tiene y tuvo mucha importancia, cosa que demuestran las muchas ruinas alvarizas que hay a lo largo de la ruta, antiguamente se construían para proteger las colmenas de los osos, aunque la desaparición de estos animales de la zona del Candán hicieron que se abandonara su uso. Al llegar a la carretera la cruzamos y comenzamos a bajar hasta el siguiente puente que atraviesa el río Deza antes de llegar a Portomartín, pueblo que veremos a nuestra izquierda por el camino.

El camino continúa en constante ascenso hasta el alto del monte do Coco, antes atravesaremos la aldea de Ameixedo, y se acentuará la subida hasta el mirador del Coco. Desde el mirador situado a unos 880 metros de altitud tenemos buenas vistas de la zona, las fragas de las zonas de A Carpaza, Porto do Frade, el valle formado por el rego dos Temos y al fondo el pico de Candán a 1015 metros de altitud. Seguimos hasta el alto del Coco, salvando en el último tramo unos 65 metros de desnivel, las vistas desde lo más alto son inmejorables.

El descenso es bastante empinado, bajamos poco a poco hasta la pista de tierra disfrutando de las vistas que tenemos en frente de los montes do Testeiro.

Antiguamente esta fue una buena zona minera, en donde se buscaba el estaño. Por la pista pasaremos por la casa de Coco, que era la casa del encargado de la explotación minera, allí se guardaba el estaño ya seleccionado. A lo lejos se puede apreciar la subida en zig-zag hacia las minas de estaño que luego visitaremos. Continuaremos por la pista y a continuación por senderos, en este tramo veremos varias alvarizas en ruinas, cruzaremos el río de O Porto por un puente y llegaremos al ponte dos Medos, sobre el río Deza.

Seguiremos el curso del río Deza durante un kilómetro hasta llegar al cruce que nos lleva a la primera derivación de un kilómetro hacia la zona minera. Nos desviamos por el camino para visitar las minas, en el primer desvío a mano izquierda vamos hacia los lavaderos, en donde se lavaba el escombro y separaba del estaño, allí veremos una presa para el agua las antiguas casetas y una mina. Volvemos al camino, subimos por la pista con fuerte pendiente y llegamos a las ruinas de un antiguo almacén, a los pocos metros se encuentra otra de las minas, la mina de la Corza. El estaño se sacaba hacia Soutelo de Montes y de allí se llevaba a Beariz en donde se procesaba.

Regresamos a la parte de abajo, allí están las ruinas de la central eléctrica que producía corriente para el funcionamiento de la mina, y la presa de O Pantano, en donde veremos una bonita cascada que proporcionaba agua para el funcionamiento de la central. Cerca de aquí, pero fuera de la ruta, están las ruinas de los antiguos polvorines donde se almacenaba la dinamita, los garajes de los coches y el economato, donde se distribuía la comida a los mineros.

Ya en la ruta, algo más adelante en un cruce de caminos encontramos otra de las derivaciones de 450 metros que nos lleva al área recreativa y de baño, Chapacuña de Ramiro.

Desde este punto comenzamos una subida en la que salvaremos un desnivel de casi 350 metros hasta pasar el parque eólico Amexeiras Testeiros, muy cerca del pico de A Ágoa de 911 metros de altitud y del pico Uceiro en donde se sobrepasan por poco los mil metros. En este cruce del parque eólico, en Campo Valiño, encontramos un desvío que nos permite acortar la ruta de 6,3 km. a 1,8 km., cosa que puede resultar interesante si estamos ya algo cansados. Por el camino hay alguna mesa y bancos para comer algo, también podremos ver a lo lejos la aldea de Zobra.

Bajaremos de los 850 a los 680 metros pasando por una vieja mina sellada y a continuación volveremos a subir hasta los 865, cerca de la cima del pico de Rabeixa, en el parque eólico, en donde se dividen los municipios y provincias de Lalín (Pontevedra) y O Irixo (Ourense).

Poco camino nos quedará para terminar la ruta, bajando hasta el pueblo de Liñeiras, en donde hay una derivación de 1,5 km. hasta la Casa Grande de Chedas y continuando finalmente hasta Zobra pasando por la iglesia un poco antes de llegar a nuestra meta.

MAPA:

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